Sé que soy un pesado, pero la actividad física es muuuy importante. De hecho, hace poco he estado leyendo mucho sobre el tema, así que déjame explicarte cuáles son los beneficios de la actividad física. No nos quedaremos en lo obvio, ya te aviso.
¡Si después de leerme aún no te han entrado ganas de hacer ni que sea una caminata saludable o 5 minutos de ejercicios en casa te prometo que no te molestaré más!
Temario
1. Previene el alzhéimer
Lo pongo lo primero, porque necesito que lo sepas.
Según los expertos que lo han estudiado a fondo, realizar ejercicio de forma regular (varias veces por semana entre 30 y 60 minutos) puede lograr reducir las probabilidades de padecer los problemas asociados con la enfermedad hasta en un 20%.
Por tanto, una persona que hace ejercicio:
- Mantiene su capacidad de pensar, razonar o aprender a pesar de los años
- Mejora su memoria
- Tiene una mayor capacidad de razonamiento
- Retrasa la aparición de alzhéimer e incluso puede enlentecer la aparición de los síntomas. Esto no es solo debido a que hacer ejercicio mejora tu circulación, sino porque aumenta la cantidad de químicos en tu cerebro, que lo protegen. En parte, esto es lo que se conoce como reserva cognitiva, de lo cual hablaremos en profundidad otro día.
Según afirma un libro Cuida tu cerebro de Álvaro Bilbao, que me estoy leyendo, los beneficios del ejercicio se notan más cuanto más pronto durante tu vida hayas empezado con esta saludable práctica.
¡Estoy supercontento de haber empezado con 30 años a realizar ejercicio cada día!

2. Te pone de buen humor
Es imposible no acabar de buen humor después de un paseo de 30 minutos. Lo digo porque tu cuerpo acaba infestado de endorfinas que mejoran tu estado de ánimo.
¡El ejercicio es la mejor cura contra la depresión!
Tras una pequeña sesión de ejercicios te sentirás como nuevo por dentro, ¡así que asegúrate de hacer aunque sea un poquito al comenzar el día para ir con ese boost extra de felicidad!
¿Qué te parece? A mí me parece que ya tienes dos buenas razones para hacer ejercicio. Quédate quieto un momento, porque aún no he acabado.
3. Aumenta tu energía
¿Quieres ser más productivo durante tu día? No hay problema: Invierte 5 o 10 minutos en una pequeña sesión de ejercicios diaria y verás cómo explotas de energía. Al haber estado en movimiento, la circulación de tu cuerpo es mucho más fluida y eso te permite desenvolverte mucho mejor y más rápido ante cualquier problemática que se te presente.
Esto, evolutivamente tiene mucha lógica, ya que es muy posible que cuando haya que hacer ejercicio es señal de que hay que huir de algún peligro, para sobrevivir. Es entonces cuando tu cuerpo lo da todo e intenta que sobrevivas dándote todos los recursos posibles.
No pierdes esos 5 o 10 minutos diarios de ejercicio, más bien al contrario: Consigues que el resto del día lo tomes con energía, ganas, buen humor y mucha fuerza. Ponerte al límite tiene esas ventajas.
Solo, procura no abusar de estas sesiones de ejercicios. Haz ejercicios suaves, sobre todo al inicio, y evitarás lesionarte o causarte algún desgaste innecesario.

4. Duermes mejor
¿Alguna vez has ido de excursión? Apuesto lo que quieras a que cuando has vuelto a casa te has sentido cansado, y te has echado una buena siesta.
Es lógico: Como estarás más cansado, vas a dormir mucho mejor durante las noches. Si no tienes razones para dormir, tu cuerpo no va a querer hacerlo y entonces vendrá el insomnio.
5. Comerás más a gusto
Por razones parecidas a cuando duermes mejor, al ir a comer después de ejercitarte, tu cuerpo te pedirá a gritos una buena alimentación. Es ahí cuando sentirás que todo lo que comes sabe mejor. Un plato de macarrones de toda la vida te sabrá a gloria después de una sesión de running.

6. Socializas
Reconozco que precisamente yo no soy una persona muy sociable, pero está claro que hacer ejercicio de forma constante te acaba uniendo a otros compañeros de fatiga. El deporte estimula mucho el compañerismo, y es que no es casualidad que muchas de nuestras disciplinas impliquen a varios aficionados o profesionales trabajando conjuntamente.
Solo por el hecho de hacer trekking acabarás juntándote con grupos locales de personas que comparten tus aficiones. Lo mismo ocurre cuando vas al gimnasio de forma recurrente: Acabas conociendo a otras personas de allí y haces tu grupito de amiguetes. Si no me crees, date un tiempo y lo verás.
7. Hacer ejercicio adelgaza
No quería tirar de lo obvio, pero es que tampoco hay que negarlo. Si haces ejercicio vas a quemar grasas SEGURO. Aunque solo hagas 5 minutos al día, esto va a tener un efecto en tu metabolismo, que se acelerará y empezarás a notar cómo bajas de peso, poco a poco.
Ante todo, no quiero que te obsesiones con adelgazar. Es algo habitual al hacer ejercicio, solemos pretender perder el sobrepeso que llevamos años acumulando en un par de meses. La realidad es que los cambios, para que sean permanentes, tienen que ser graduales. De lo contrario, tendrás el conocido efecto yo-yo.
¿Cuál es el secreto detrás de todo esto?
Resumamos un poco: Cuando haces ejercicio estás de mejor humor, duermes mejor, comes mejor, tienes más energía, adelgazas, haces nuevos amigos aumentas tu reserva cognitiva…
Tiene que haber alguna trampa, ¿verdad? ¡No puede ser que haya tantas cosas buenas en una simple actividad y que tan poca gente haga ejercicio!
Y es que hacer ejercicio cuesta, como todo lo que vale la pena en esta vida. Por muy bien que lo pinte, la cuestión es que mucha gente no hace ejercicio a pesar de las grandes ventajas que tiene. Creo que la base está en que les falta algo de motivación para hacer ejercicio.
¡Haz una cosa: plantéate realizar 5 minutos de ejercicio cada día por un mes, como parte de tu resolución de año nuevo!
Honestamente, creo que si logran superar esa barrera de resistencia inicial, lograrán conseguir todos los beneficios de la actividad física. Yo cada vez estoy más convencido de que lo mejor que puedes hacer en 5 minutos es ejercitarte ¿y tú… a qué estás esperando?