Cuando algo malo nos pasa, los seres humanos podemos reaccionar de muchas formas distintas y esto puede determinar nuestro éxito en gran medida. Una de las claves para que sobrevivamos con éxito a estas situaciones es la resiliencia. Si no sabes lo que es o quieres ser más resiliente te recomiendo que lo descubras en este artículo.
Temario
¿Qué es la resiliencia?
Antes de entrar en materia permíteme que dejemos las cosas claras. La resiliencia es la habilidad que tiene una persona para adaptarse a una situación negativa y sacarle partido, incluso saliendo fortalecida. Es el mismo principio por el que se rige la famosa cita de Dale Carnegie
“Si la vida te da limones… ¡haz limonada!”
Y es que la habilidad para superar situaciones duras, y encima crecer, es algo muy valioso en esta sociedad. Ser alguien resiliente es ser alguien casi invencible emocionalmente, que siempre tirará para adelante pase lo que pase. Alguien que no se rendirá nunca en sus metas, sino que más bien se animará ante la adversidad.

Por las experiencias por las que he pasado (he sobrevivido a varios acosos graves en el instituto y he pasado varios meses en las selvas de Venezuela en medio de una crisis política y económica, además con varios peligros pisándome los talones… empezando, fracasando y volviendo a arrancar varios negocios… entre otras muchas experiencias y dificultades que nunca me han hecho abandonar) creo que tengo derecho a afirmar que soy resiliente, y por eso me considero válido para escribir el siguiente apartado según mi experiencia y formación como psicólogo.
Cómo ser resiliente: 5 claves
Originalmente, la resiliencia se percibía como una característica innata, como si los resilientes estuvieran bendecidos por los dioses, con una voluntad inquebrantable. Cada vez está más claro que esto no es así, ya que cualquiera puede ser resiliente si tiene la educación y mentalidad adecuada.
Yo de pequeño era un hijo único consentido y era de todo menos resiliente. No fue hasta la secundaria, cuando se empezaron a complicar las cosas, que empecé a espabilar, a cambiar mi mentalidad de niño mimado y me puse las pilas. Claro que todo ha sido un largo y lento proceso de aprendizaje, pero sé que he cambiado mucho. Hoy en día hay muchas personas de por aquel entonces que no me reconocerían.
1. Adáptate
Uno de los mejores consejos que te puedo dar para ser más resiliente, tal vez el mejor, es que aprendas a adaptarte a las malas situaciones. Cuando te pase algo malo empieza desde el minuto 0 a mentalizarte en que esa es la realidad, que no se puede viajar al pasado y cambiarla. Todo lo que te queda es luchar con lo que tienes y seguir para adelante sin perder el tiempo.
Evidentemente puedes quejarte, todos lo hacemos, pero luego mira al horizonte y piensa, busca, investiga, pregunta, obsesiónate, con formas de salir de esta.
Si algo no te funciona, no te apegues, sigue dándole vueltas al coco y encontrarás miles de soluciones posibles a tu situación. Por mala que esta parezca, verás como no rendirse es la mejor estrategia. Si parece que no puedes hacer nada, no importa, sé cabezón y sigue intentándolo sin importar qué. Pronto verás resultados.
No dudes, ACTÚA
Da igual si tienes que hacer un gran cambio para lograr tus objetivos, lo importante es que sigas siempre en pie. A mí no me importaría cambiar mi situación actual si sé que al final seguiré haciendo lo que quiero, y que es para cumplir mi objetivo. Si alguna vez tengo que dejar mis proyectos y trabajar unos meses en una gasolinera para seguir comiendo, lo hago.
2. Ser positivo
Puede que te sorprenda (es broma), pero la misión de este blog es que tengas una experiencia más positiva en tu vida. Por eso mismo no puedo dejar de repetir lo que hemos dicho miles de veces: Debes ser positivo para superar mejor tus obstáculos. Acuérdate de la frase sobre la que reflexioné el otro día:
“La gente positiva cambia el mundo, mientras que la negativa lo mantiene como está”
Ver la vida de una forma más positiva no solo te dará más fuerzas, sino que te hará más feliz. Lo mejor es que todo empieza con la voluntad: Si tú quieres regalarte momentos positivos en tu vida, los encontrarás tarde o temprano y esto te ayudará a sobrellevar cualquier situación.
Si, en cambio, te centras en lo negativo solo verás cosas malas a tu alrededor y te podrías desanimar. Siempre que sientas que te faltan fuerzas, ten en cuenta cuál es tu estado y reacciona.

3. Pide ayuda
Las personas resilientes no son aquellas que pasan por todo a solas, sino aquellas que se adaptan y se hacen más fuertes ante la adversidad. Esto no quiere decir que tengas que luchar solo o sola.
Lo más inteligente, cuando sabes que alguien te puede ayudar a superar una situación, es pedir ayuda. El sentido común debe ser más poderoso que emociones inútiles como el orgullo.
4. Ten una razón para luchar
Cuando ocurre lo peor, puede sernos de gran ayuda tener algo por lo que luchar. Puede ser una persona, un pensamiento o una ambición muy grande. Todo vale con tal de que eso nos inspire y nos ayude a trabajar lo más duro que podamos para pasar el bache.
Para algunos, el tener hijos marca un antes y un después en su vida. Para otros, es una idea o imagen de un futuro que está muy claro en su mente.
Piensa en aquello que más quieres o lo que más te gustaría conseguir en la vida, seguro que eso te inspira y te motiva a esforzarte.
5. Sé metódico
Una de las cosas que más me ha ayudado a conseguir todo lo que me he planteado hasta ahora ha sido ser muy conciso con el sistema que quiero seguir. Cuando tomo una decisión sobre algo que quiero hacer busco el sistema o método para llegar a conseguirlo, y siempre me funciona.
Para ponerte un ejemplo: Si estás sin trabajo y necesitas encontrar uno lo más pronto posible, haz una lista. Programa todo lo que harás a partir de YA para conseguir ese trabajo que te interesa. Forma un elaborado plan, con todos y cada uno de los pasos bien marcados.

Es muy seguro que no todo de lo que has planeado pasará tal y como esperabas, pero mientras te entretienes con tu sistema no tendrás momento alguno para desanimarte. Cada paso te llevará a la próxima tarea y no tendrás tiempo para respirar y lamentarte.
Una vez tengas claras tus metas sigue trabajando en aquello que quieres. No importa lo imposible que parezca: Nadie dijo que fuera fácil conseguir las cosas más interesantes. Si lo fuera, no tendrían mérito, ¿no crees?
Ahora ya sabes cómo ser resiliente, ¡así que no procrastines más y sigue luchando por lo que quieres! Yo haré lo mismo.