¿Así que buscas cursos de cocina? En este artículo exploraremos el mundillo de la cocina y veremos qué puedes hacer para volverte todo un cocinillas. Si aún la cocina no te convence del todo, lee con atención el siguiente punto. Más adelante te digo qué puedes hacer y dónde ir para aprender cocina.
Temario
Beneficios de elegir la cocina como un hobby
La verdad es que haces bien de pensar en empezar a cocinar de manera más seria, seas hombre, mujer o algo diferente. En principio, a mí la cocina es algo que no me acaba de gustar, pero hay ciertos platos que me encanta crear por lo mucho que se disfrutan después. Exacto, estoy hablando de los deliciosos postres, pero esta reflexión no va sobre los dulces.
Como ya dicen, el saber no ocupa lugar y para mí está claro que tener una habilidad mínima en cocinar es darte la capacidad de aportarte mucha calidad de vida, ya que piensa que todo lo que cocines te lo comerás tú. Cocinar, como dicen algunos, es creatividad, es arte… y creo que podría irme bien entre tecleo y tecleo.
Llevamos ya mucho tiempo hablando sobre alimentación en el blog, y queda bastante patente que cuando cocinas tú puedes escoger mejor qué ingredientes te convienen (algo importante si eres celíaco y necesitas una dieta libre de gluten) o incluso si quieres cultivarte tus propios alimentos, como los tomates (como voy a intentar hacer yo). La cosa es que quien mejor puede darte de comer eres tú mismo, que sabes lo que más te apetece.
Además, en cualquier hogar (y dejando a un lado los estereotipos machistas de roles) se agradece que no haya una sola persona que sepa cocinar, sino que sean varias las que colaboren en esta actividad. Aunque en mi casa yo no tengo el rol de cocinero (aunque sí el de limpiador, por ejemplo), sí que a veces creo que a mi mujer le vendría bien una mano con algunas comidas, e intento hacer de comer cuando ella está cansada o indispuesta para cocinar.
El equilibrio en el hogar
Lo que ocurre es que, aunque sé cocinar un poco, nuestro nivel de habilidad cocinando es muy dispar, tanto que mis platos suelen ser cosas básicas como huevos fritos, macarrones, carne, etc. Ella, en cambio, es capaz de crear recetas que te dejan atónito, como un risotto o una lasaña casera.
Es ponerme yo a cocinar y me pongo a pensar en todas las cosas ricas que solemos comer y que hace mi mujer, y en el fondo me encantaría llegar a estar a su nivel para que de vez en cuando podamos intercambiar roles.
Piénsalo. En el fondo, es buena idea querer aprender a cocinar de una manera un poco más seria. Si yo viviera solo, seguramente la pereza y la falta de conocimiento me harían vivir teniendo una dieta muy desequilibrada, lo que probablemente me llevaría a la falta de nutrientes, vitaminas y a la enfermedad a largo plazo.
Además, es de agradecer tener a alguien a tu lado que puede hacer tus tareas al mismo nivel de calidad que tú.

La cocina como terapia
Además, a veces la cocina puede ser una buena manera de desconectar, de deshacerse del estrés. Como cualquier otra actividad, la cocina es algo entretenido que te mantiene enganchado durante un buen rato y que te permite conseguir un resultado. Ese resultado es fruto de tu esfuerzo, y a menudo es comestible.
Creo que sobra decirlo, pero la cocina puede ser un hobby como cualquier otro. Yo no lo he hecho mucho, pero sé que me lo paso bien creando. Por ejemplo, ahora mismo estoy escribiendo este texto, y con la creación me siento pleno. Lo mismo pasa con la cocina, en la que en realidad lo que estás haciendo es disfrutar de la creación y además acabas aportando una fuente de placer para ti y otros seres queridos.
La propia terapia también entraña cierto peligro, por supuesto. No tendría sentido cocinar cada día un pastel de chocolate o un brownie, como me gusta hacer a mí. La cuestión es saber encontrar el equilibrio y pautarse bien los menús.
Con lo organizado que soy, si supiera cocinar de verdad, que ojalá, seguramente en casa tendríamos mucho mejor controlados los alimentos e ingredientes que compramos, porque me encanta tener ciertos recursos en la recámara (o menús, en este caso).
Venga, ¿te animas a aprender un poco de cocina? ¡Nunca viene mal!

Cómo aprender cocina
Los cursos de cocina es ideal hacerlos de manera presencial, no hay vuelta de tuerca. Esto es porque así la persona que está coordinando a sus alumnos puede corregirlos al momento por cómo están sujetando los utensilios o los ingredientes que pretenden cortar, por ejemplo. También puede ayudar con cantidades y demás.
La cosa es que como cocinar es un arte, resulta relativamente difícil aprender sin tener a alguien a tu lado que te vaya dando indicaciones. No obstante, ya verás que tienes muchas alternativas, incluso gratuitas, como todo lo que encuentras en internet hoy en día (con sus desventajas).
Cursos de cocina presenciales
Para empezar, yo te recomendaría visitar portales como Atrápalo, donde encontrarás siempre cursos cerca de tu localidad en España. Por ejemplo, ahora en Madrid (capital de España) se están ofertando cursos como:
- Chocomaster Madrid: Un curso ideal para los fanáticos del chocolate como yo. Ahí disfrutaría de lo lindo. También hay versión para niños con sus padres, por si te interesa.
- Sesión para mojar pan: Siempre he querido aprender a cocinar mejor la carne, para aprender a salirme de lo habitual, y en esta sesión de cocina enseñan a elaborar rabo de toro, codornices a la toledana, salmón en salsa de vermut y escabeches de pollo y pescado, entre otras cosas.
- Masterclass de cocina española en Madrid: Si tienes cravings de comida española, aquí te pondrás las botas.
Estos son solo unos pocos ejemplos. Parece que en cada ciudad importante hay siempre eventos y talleres nuevos de cocina. Realmente son experiencias que vale la pena hacer, incluso para hacer en conjunto con tu pareja.
Además, por supuesto hay grandes escuelas de cocina y carreras técnicas profesionales de cocineros, aunque no creo que sea lo que estés buscando de momento, ¿no? En ese caso, una buena referencia serían las Escuelas de Hostelería de tu localidad, que las puedes conocer en tus cursos o puedes encontrarlas por internet fácilmente.

Cursos de cocina online
Si quieres invertir en tus habilidades, pero prefieres hacer este tipo de cursos a distancia, te recomiendo la plataforma de cursos online especializados en cocina Scoolinary, destacada en grandes medios. Ahí tienes recetas profesionales con muchísimas lecciones para que te vuelvas loco/a haciendo. Uno al que le tengo echado yo el ojo es al curso de 39 lecciones (al menos mientras escribo esto) de entremets y tartaletas de Antonio Bachour, que por cierto es chef pastelero y considerado el mejor pastelero del mundo (aunque ni lo conocía) en 2018, 2019 y 2022.
Aprende a cocinar GRATIS
Verás, no hace falta que te dejes dinero si quieres aprender a cocinar.
Como suelen decir, la práctica hace al maestro, y la mejor manera de aprender es ponerte “manos en la masa”, ¡nunca mejor dicho! Si tienes bajo presupuesto, ni te preocupes.
Por supuesto, una manera de practicar sería crear cualquier receta que te guste, pero quiero ir un poco más allá con este artículo. Aquí tienes algunos cursos gratuitos que te pueden ayudar, y que están pensados para enseñarte a cocinar mejor:
Lista de reproducción del curso
Aquí tienes un curso de técnicas de cocina (también en su lista)
Lista de reproducción del curso
Como ves, encontrar cursos de cocina no es tan difícil como parece. Ya te digo: practica con todos estos cursos que te he compartido y seguro que lograrás disfrutar mucho de este nuevo hobby. Yo lo voy a hacer, que no te quepa duda.