¿Hace poco que has adoptado o rescatado a un gatito bebé y no sabes cómo debes reaccionar para que tenga los mejores cuidados? ¡No te preocupes, en animales soy un experto! Hoy te explicaré todo lo que debes saber sobre cuidados para gatos o gatitos recién nacidos.
Si viste nuestro artículo sobre 5 razones para adoptar una mascota y te has decidido por un gato, ¡te damos la enhorabuena! Ahora solo te queda seguir estos pasos para garantizar que todo esté correctamente.
Temario
Llévalo al veterinario
Lo primero que debes hacer con tu gatito recién nacido es llevarlo al veterinario. Piensa que antes de pisar el suelo de tu casa, deberemos asegurarnos de que el gatito tiene todas las vacunas pertinentes para estar protegido contra enfermedades.
Esto es aún más importante si se trata de un gatito huérfano, que hayas recogido de la calle.
El veterinario revisará a tu gato para detectar posibles problemas ya existentes y te dará consejos sobre su cuidado. Te recomendamos que estés muy atento a todo lo que te diga, ya que podría marcar la diferencia en la futura calidad de vida del pequeño peludo.
Si crees que no puedes permitirte un veterinario, pide ayuda de protectoras locales y seguro que te sabrán asesorar o incluso encontrarás un veterinario que te ayude de forma gratuita.
Aliméntalo como necesita
Cuando se trata de alimentar gatitos pequeños, olvídate de alimentos como la leche de vaca y otros clásicos.
Lo que debes comprarle a tu gatito recién nacido son alimentos especialmente preparados para ellos, con preparados sustitutivos de leche materna. Esto lo venden en veterinarias o tiendas especializadas. Permite que tu veterinario de confianza te recomiende una marca y unas especificaciones después de revisar a tu gatito.
Eso no es todo: también será importante saber racionar la comida para tu gatito. Es importante que tengas en cuenta que necesitarán comer muy a menudo. Sobre todo cuando sean más jovencitos. Esto variará según su edad:
- Gatitos de menos de una semana: Cada 2–3 horas
- Gatitos de dos semanas de vida: Cada 4–6 horas
- Gatitos de más de 3 semanas: Cada 6–8 horas
¡Recuerda no sobre-alimentarlo! Divide su ración diaria entre todas las comidas del día, que idealmente será de 1/4 de su peso corporal.
Cuando le des de comer, no lo acostes como un bebé (no es natural para ellos) sino boca abajo. Si ves que no quiere comer, estimúlalo tocando su frente y su lomo con un dedo, simulando la lengua de su madre.

Calentito
Ya sabemos lo tiernos y monos que son los gatitos recién nacidos. Nuestro instinto de madres nos hace querer abrazarlos y tenerlos con nosotros todo el día. No va tan desencaminado, la verdad.
La realidad es que los gatitos no pueden regular su propia temperatura corporal, algo que les hace necesitar del contacto de su madre (o tu, en este caso) para que los calienten. Esto les permitirá hacer la digestión y estar felices.
Te aseguro que un gato que haya sido amamantado y cuidado desde pequeño por ti, tendrá un vínculo muy especial contigo.
Si en algún momento necesitas dejar al gatito en algún lado porque tengas que hacer algo, te recomendamos que le compres una manta eléctrica para gatos (cubriéndola con dos toallas para que el calor sea menos potente).
Protegido
Debes tener en cuenta que los gatos bebé son muy delicados, especialmente durante esta etapa tan temprana.
Lo que te recomiendo es que tengas a tu gatito separado de los posibles peligros de toda la casa. Esto incluye a niños, mascotas y toda clase de cachivaches.
Una buena idea, para protegerlos, es tenerlos en una habitación cerrada pequeña, donde no puedan golpearse con nada. Otra opción es hacerles una especie de corral donde no pueda entrar nada para hacerles daño.

Ayúdale a ir al baño
Ir al baño es muy importante para cualquier ser vivo. Si tu gatito no puede hacer sus necesidades, cosa natural al principio de su vida, tendrá problemas de salud.
A los gatitos pequeños les cuesta mucho aprender a hacer sus necesidades, por lo que la madre suele lamerles sus partes para facilitarles el proceso.
Obviamente, esto no lo podemos hacer nosotros, así que podremos estimularlos usando un algodón bañado en agua tibia. Deberemos darle con él en la barriguita y en sus partes, hasta que se anime a hacer sus necesidades. Esto suele tardar entre uno y dos minutos.
Tranquilo, que no durará mucho. Esto solo deberás hacerlo hasta su primer mes de vida.
Limpio
Es muy recomendable que mantengas limpio a tu gatito. De esta forma, él aprenderá lo valioso que es estar siempre limpio y lo será más cuando crezca.
Normalmente, las madres suelen limpiar a sus gatitos durante largas sesiones donde las atenciones no son pocas. Te recomiendo que mimes a tu gatito de la misma forma, simulando ser su madre.
Una buena forma de simular la lengua de la madre es usando paños húmedos o toallitas húmedas para bebés. Estas puedes pasarlas por el cuerpo del gatito, suavemente.
¡Verás cuánto le gusta y se relaja!
Cuando hagas la sesión de limpieza, aprovecha para revisar sus orejas en busca de parásitos, en especial las pulgas.

¿Cómo está creciendo?
También te recomiendo que tengas un control del crecimiento de tu gatito. Esto podrás hacerlo mediante el uso de una balanza.
Deberás pesarlos cada semana, y lo normal a esperar será un crecimiento de 100 gramos por semana. Si ves que sube y baja muy rápido de peso, será señal de que necesita pasar por el veterinario(posiblemente serán síntomas de alguna enfermedad o problema)
¿Cuando deben dejar de beber leche?
Por último, nos toca hablar de cuando el gato empezará a madurar y a dejar de ser un bebé. Empezará a comer comida sólida, pero créeme si te digo que este puede ser un proceso leeeeeeento, sobre todo si no lo hacemos bien. Hay que saber leer las señales que los gatitos nos dan.
Cuando tu gato bebé lleve más de 4 semanas de vida, empezará a morder cada vez más fuerte el chupete del biberón. Esto querrá decir que ya están listos para dejar de mamar.
Piénsalo con lógica: si esto se lo hicieran a la madre, ella automáticamente los apartaría por el dolor que esto le pudiera causar. El impulso de los gatos de morder se traducirá en la necesidad de comer alimentos más sólidos.
Una buena forma de empezar es darles un pequeño plato con su fórmula preparada en forma líquida. Así, empezarán a entender que deben comer solitos. Luego, te recomiendo que empieces a darles alimento húmedo combinado con esta fórmula (haciendo primero una pasta, como si fuera papilla). Sabrás si tu gato está listo para dar el siguiente paso cuando veas que come sin poner impedimentos.
Esto será un proceso gradual, y verás como el gato se irá adaptando a esta nueva forma de comer. Aunque siempre deberás estar atento para ver si se lo come o no, y de no ser así darle el biberón para que no se quede sin energías.
A alrededor de 8 semanas, la mayoría de gatitos ya están listos para empezar a comer alimento seco. Ten mucha paciencia y no te preocupes si tu gato aún no come sólido. A algunos les puede costar más pero lo acabarán consiguiendo.