A lo largo de los años, en muchos monólogos, series de televisión, películas, libros… lo que sea, he oído muchas referencias al sexo tántrico. Sin embargo, hasta ahora nunca me había parado a pensar sobre qué significa el concepto del sexo tántrico, seriamente.
La verdad es que nunca me lo había tomado en serio, pero ahora que tengo la oportunidad de explorar nuevos conceptos gracias al abierto temario que me proporciona este blog de bienestar, creo que estoy listo para hacerlo.
Sin duda, es algo que siempre llama la atención cuando lo dices… sexo tántrico… ¿Pero qué significa exactamente?, en otras palabras…

¿Qué es el sexo tántrico?
Tántrico viene de Tantra, una doctrina oriental que busca la plenitud espiritual de las personas que la siguen, y que busca encontrar la plenitud espiritual en los placeres mundanos de la vida. El propósito del tantra está en descubrir una unión extática con la vida, más allá del sentido y del yo.
En otras palabras, el sexo tántrico es la práctica espiritual en forma de sexo. Una puerta hacia el descubrimiento de uno mismo y esa verdad que lo trasciende todo. Buscando, asimismo, el máximo placer prestando atención a todo lo que el cuerpo siente. Por supuesto, también los genitales tienen cosas para transmitir a ambos componentes de la pareja.
Si has practicado conmigo los principios de la meditación te darás cuenta de que el sexo tántrico es algo muy similar, en el sentido de que en realidad no tienes casi que moverte. Se trata de estar plenamente consciente de lo que haces y disfrutar de todos los detalles, poco a poco.
La meditación está en cada movimiento, que haces concienzudamente y con todo tu cerebro centrado. Por eso mismo, también es una forma ideal de desconectar de tus problemas y entrenar a la vez tu capacidad de concentración. El placer que sientes cuando estás en pleno sexo tántrico se traduce en algo más que deseo o placer carnal. Es, simplemente, satisfacción plena lo que sientes, no hay nada que pueda romper este momento mágico porque en tu mente tampoco cabe nada más.
Si quieres romper con la monotonía en las relaciones sexuales con tu pareja, la práctica del sexo tántrico puede ser una gran idea, dicho sin tabúes.
Se dice que las parejas que prueban el sexo tántrico y consiguen disfrutar de la experiencia (probablemente, por haberlo practicado con éxito y haber descubierto lo que realmente es) acaban queriendo volverlo a probar. Una vez tienes a una pareja con la que compartes algo así, dudo que puedas volver a ver el sexo de la misma manera.
La relación se torna algo más profundo, una fuente de placer que tienes la seguridad que el otro te puede aportar, algo que sin duda se valorará mucho.

¿Cómo hacer sexo tántrico?
No entraré en detalles que no sean necesarios, porque me gusta mantener el tono del blog en algo discreto aunque cercano. Partiremos de los principios básicos del Tantra.
El Tantra dice que para disfrutar de la vida, uno primero tiene que aceptarse a uno mismo tal y como ha venido al mundo, así como aceptar también a los demás. Me atrevería a decir que este sería uno de los principios de la felicidad y de la escucha activa. O de las amistades irrompibles, pero eso ya son otros temas para otro día.
La idea base del sexo tántrico es hacerlo sin prisas, disfrutando cada aliento, cada gesto, cada textura de la piel de la persona a la que tanto quieres y con la que haces el amor.
Otro punto clave del que se habla mucho en el sexo tántrico es de la ausencia de eyaculación, algo que parece imposible para muchos. En realidad, como se trata de algo que está comprobado, es posible hacerlo aunque me imagino que requiere mucha práctica.
La base de esta práctica consiste en que, antes del coito, el hombre debe realizarse una masturbación parando poco antes de llegar al orgasmo. Si hace falta, varias veces, de forma que la excitación baja y así no se llega a eyacular con tanta facilidad.
Aunque esta eyaculación se diese, los expertos en Tantra dicen que se debe aguantar la respiración y apretar la musculatura mientras el orgasmo se experimenta, de forma que no se eyacula. Estoy seguro de que no es imposible, pero tampoco fácil. Según he podido investigar, hay que realizar varios ejercicios, que entran el músculo conocido como pubocoxígeo, situado en el suelo de la pelvis.
Unos ejercicios muy recomendados para esto son los ejercicios de Kegel. Aprovecho también para recomendarte hacer rutinas de fitness en casa, así aprovechas para fortalecer otros de tus músculos cuando quieras realizar estos entrenamientos.

Otros consejos sobre practicar sexo tántrico
Las reflexiones no se acaban aquí. Sé que no es tan fácil como suena, y por ello quiero que te pares un momento a pensar sobre esto.
Después de leer este artículo no empieces a intentar contener la eyaculación sin más, o realizar los movimientos o ejercicios que te propongan los expertos.
Empieza a leer sobre el Tantra, inspírate y conoce mejor la cultura y el porqué que hay detrás del sexo tántrico, seguro que te ayuda muchísimo a disfrutar aún más de la experiencia o a prepararte mejor.
Reserva un tiempo cada día para seguir explorando poco a poco esta posibilidad, y anima a tu pareja a hacerlo también. Pero, sobre todo, no saltéis a probar el sexo tántrico sin antes tomar las medidas de higiene y seguridad adecuadas. No quiero que una práctica de cualquier tipo os pueda causar un disgusto.
Según lo que dicen los expertos, practicar bien el sexo tántrico lleva su tiempo, así que no tengáis prisa por experimentarlo. Igual que sucede con las meditaciones, es algo que requiere práctica y constancia… y obviamente también tiempo para dedicaros mutuamente.
Aunque tengáis que hacer pequeños ejercicios y luego parar, habrá valido la pena porque al final acabaréis entendiendo y realizando con éxito el sexo tántrico, por el que ahora mostráis tanto interés. Todo lo que se tarda en conseguir vale la pena, créeme.